Me enamoré de Álex solo verlo. Piel lisa, lisa lisa, sueño profundo, pelito fiiiiiino y mil sonrisas :)

Cada sesión newborn es un mundo, todos los bebés tienen detalles distintos, sueños distintos, gestos distintos. Y todos y cada uno de ellos te hacen pensar que la vida es absolutamente increíble. Todo se forma dentro de su madre y sale ya hecho. Nuevo, perfecto, increíble. No me cansaré de decirlo. Estamos muy acostumbrados a ver nacer bebés, pero realmente es una suerte ver cómo la naturaleza los forma.

Recuerdo que cuando estaba embarazada casi todo el mundo al final te decía: "Bueno, sea niño o niña, que nazca sano, eso es lo importante", y pensabas, vale que si, que si... Pero luego, cuando nacen, cuando salen y te los ponen encima, calientes recién salidos de tu interior. Los miras, y remiras, lloras con ellos en brazos y los quieres cada vez más y más... Entonces es cuando te das cuenta cuánta razón tenían en esa frase, y te das cuenta que la mayor parte de las personas que te la habían dicho y repetido, eran madres o padres.

Se quieren infinitamente, estos chiquitines que me visitan durante una mañana, hacen despertar en sus padres un amor tan incondicional que es hasta difícil de explicar. Y poder fotografiar cada detalle de esa nueva vida que tanto amor despierta, es para mi un privilegio immenso.

Tenéis un bebé absolutamente precioso, bienvenido Álex :)